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28 junio 2007


Los monjes automomificados

Dispersados por el norte de Japón se encuentra una veintena de monjes momificados. Esto no tiene nada de extraño, momias hay en todas partes, lo que les hace peculiares es que se automomificaron. Eran seguidores de Shugendô, una antigua forma de budismo.

Durante 1000 días seguían una estricta dieta de semillas y frutos secos que encontraban en los alrededores del monasterio, acompañada de un riguroso ejercicio físico con el que eliminaban prácticamente la totalidad de su grasa corporal.

Después de este periodo (casi tres años) su dieta se volvía aún más restrictiva, y durante otros 1000 días solo se les permitía comer una pequeña cantidad de corteza y raíz de pino, con esto eliminaban gran parte de la humedad de su cuerpo para evitar la descomposición. Al final de este tiempo, empezaban a beber un té venenoso que les provocaba vómitos y sudoración, al mismo tiempo que mataba cualquier insecto que quisiese comerse su cuerpo tras la muerte. En este momento parecían esqueletos vivientes.

Finalmente, se emparedaban en una habitación poco más grande que sus cuerpos en la posición de loto. Su único contacto con el exterior era un tubo de ventilación y una campana que hacían sonar una vez al día. Cuando la campana dejaba de sonar, el resto de monjes cerraban el conducto de ventilación.

Al abrir las tumbas descubrieron que no todos consiguieron evitar la descomposición de sus cuerpos. Las tumbas de los que no lo lograron se sellaron de nuevo, se les respeta por su resistencia, pero no se les adora, al contrario de los que sí lo lograron, que son venerados.

Vía Kircher Society | Categoría Curiosidades

5 Comentarios: Publicar un comentario

  • Blogger el_Vania (28/6/07 12:35)  

    Desde luego, hay que ser gilipollas para automomificarse... no será mejor echar unas birras y un buen casquete, digo yo?
    Payasos!

    Salud/OS!

  • Anonymous Anónimo (29/6/07 01:17)  

    Todo depende de las circunstancias, viviendo en un monasterio rodeado de monjes calvos, meditando todo el día y sin probar el alcohol, el suicidio empieza a verse con otros ojos...

    Aunque todo eso lo hacían por un dios que seguramente ni siquiera exista más que en sus mentes. Si, me quedo con tu definición, payasos.

    Saludos!

  • Anonymous Anónimo (3/7/07 06:10)  

    Noto raro al monje de la imagen, su cabeza parece que fuese metalizada, parece una cabeza cromada.

    Ya quisieran los chechenos que sus armas fueren asi.

    Salu2.

  • Anonymous Anónimo (12/7/09 22:32)  

    A los que les llamáis con completa alegría payasos...

    sois unos putos deficientes, no aspiráis a más en la vida que a matar el tiempo, el truño de una vaca vale más que vosotros que por lo menos abonará la hierba que después alimentará a otra vaca.

    esta gente consigue con su sacrificio el paso consciente, dueños de si mismos, a otro plano de existencia dónde lo inimaginable es posible, pero vuestras patéticas mentes no lo comprenderán jamás.

    mejor así, así ese lugar estará libre de vómitos como vosotros.

  • Anonymous MataRatas (13/7/09 02:06)  

    Anónimo, tan convencido estás de que hay otro plano de la existencia?

    Esta gente consigue con su sacrificio el paso a un agujero en el cual alimentarán gusanos, y sí, pasarte la vida amargado por voluntad propia para acabar descubriendo que después de eso no existe nada solo tiene una definición, te guste o no.

    Igual me equivoco y os lo pasáis de lujo en vuestro lugar feliz libre de vómitos comiendo arco iris para toda la eternidad, pero sinceramente, no voy a arriesgarme.

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